jueves, 3 de mayo de 2012

Mi viejo y la tendencia actualizante

Mi viejo es un ser cuyo comportamiento es sumamente errático, sin embargo él cuenta con la actualización de los sistemas inteligentes, tal como la describe el computacionalismo.

La historia de las actividades de Bobi Gerstmann desde que vivo con él se remonta a una pequeña serie de hechos aparentemente aislados, pero que sin embargo se enlazan por una pauta comportamental que podría ser descrita como la clave del éxito en inteligencia artificial. Un día, al llegar al departamento, encontré todas las verduras descongeladas y las bandejas de hielo sobre el mesón, ante mi extrañamiento me dispuse a abrir el congelador para conocer cuál era la causa de la expulsión de dichos víveres, qué había ocupado su lugar. Ahí encontré un lote de bandejas de panitas y varios kilos de pulpa de cerdo. Recién comenzaba a familiarizarme con lo que -sin saberlo- sería una dinámica recurrente. La siguiente compra de Bobi Gerstmann consistió en varios kilos de frutas diversas, las cuales comenzaron a podrirse cuando aún quedaba bastante. Sin embargo Bobi Gerstmann notó una particularidad en el patrón de consumo de las frutas: los kiwis habían disminuído en mayor proporción. La siguiente compra consistió en tres o cuatro kilos de kiwi. Para mi fue evidente lo que ocurriría con dicha fruta, por lo que actué anticipadamente transformándola en mermelada (debo añadir que la mermelada de kiwi se me da muy bien). Bobi Gerstmann hizo caso omiso del nuevo estado del material orgánico, para él seguía manteniendo el rótulo de "kiwi" y su apreciación fue que se acabó con bastante rapidez (en este caso la mermelada). La situación se repitió con los mismos resultados. Los episodios posteriores han considerado los más variados artículos (bebidas y papel higiénico, entre otros), sin embargo se mantiene siempre la dinámica de una compra consistente en la excesiva repetición de un único artículo, seguido de un período de evaluación, posterior al cual en el caso de ser exactamente el mismo artículo comprado, influye en un aumento de la cantidad en la compra siguiente, o en el caso de ser una variedad de artículos muy similares, influye en que la siguiente compra contempla la misma cantidad, pero repitiendo únicamente el o los artículos con mayor eficiencia de consumo.

De todo lo anterior deduzco que Bobi Gerstmann en tanto ente errático, si bien resulta del todo incomprensible, es posible reconocer en él una tendencia actualizante, que lo impulsa hacia un óptimo en el ámbito del consumo de productos. Con todo, es posible hacer una crítica a quien haya sido el programador de tan avanzado autómata, y es que el programa está diseñado sobre una falacia fundamental: que el óptimo homeostático de consumo en una situación específica, se reduce un tipo de artículo, lo cual viola claramente la multidimensionalidad de las necesidades humanas.

Si usted es Bobi Gerstmann, puede depositar su comentario aquí: Comentario